Etiquetas

jueves, 3 de diciembre de 2009

Rosicler

Rosicler astuto venga noche,

se cura el insomnio lunar.

donde hasta el sabor más picante trata de impío al paladar.

Vaga el aire hasta narices sudadas de almohadas tan solitarias como yo,

incendia el verano menesteres de ombligo.

Y propiedades blanquecinas del viento que se fue,

dejan metálico sabor a despedida,

a canción torpe,

a moretón en codo,

a ron viperino de madrugada.

a caricias que curan con malos modos.

Quizá mi lengua sepa a enjambre,

y no acalambre un sol menguante,

sobre tus ojos tan vacíos como mis ganas de verte.

No hay comentarios:

Publicar un comentario